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Sueños amarillos

Oscar Legaspi
El Ojo Político
2016-08-08 07:30:52

Los acuerdos entre las tribus perredistas siempre han sido en un solo sentido, jalar para la izquierda.

Aunque déjeme decirle que los intereses de los últimos presidentes del PRD han llevado acuerdos con sus opositores históricos, si quiere usted nombrarlos, los de la derecha.

Todo con la finalidad de arrebatarle espacio y poder al PRI, así es como han ganado gubernaturas al lado del PAN.

El poder de las franquicias partidistas como si fueran productos mercantiles, conllevan más intereses económicos que lo que un día fue su propia ideología.

Luis Miguel Barbosa, coordinador de los senadores del PRD, incrédulo en un principio y firme creyente que la imagen que hizo crecer a Miguel Mancera con perfil ciudadano dentro de las filas amarillas era lo más adecuado para la carrera presidencial.

Hoy en día, el líder de la bancada amarilla, ha dado un vuelco a su punto de vista sobre Mancera al percatarse del poder que ha alcanzado éste dentro del partido del sol azteca.

El haber hecho llegar a la presidencia perredista a su allegada Alejandra Barrales, queda de manifiesto que el control lo tiene el propio Mancera.

Luis Miguel Barbosa se inclina más por una alianza entre las izquierdas que formen un bloque único en el camino al 2018, que por una coalición con el PAN.

Barbosa ve muy lejana y hasta imposible una coalición con MORENA de Andrés Manuel López Obrador, toda vez que la soberbia del tabasqueño lo hacer creer que él solo las puede contra el PRI y el PAN.

Piensa que Mancera es el único viable dentro de su partido, para competir por la silla presidencial, pero para eso tendrá primero que afiliarse al Sol Azteca para poder representarlo.

Vómito partidista

Hablando del Sol Azteca, en Hidalgo el dirigente estatal J. Ramón Flores Reyes, decidió expulsar de las filas partidistas a César Lemus Arias, ex Secretario de movimientos sociales, sindicales y de campo del partido amarillo.

La expulsión originó que alrededor de 2 500 perredistas afines al grupo de César Lemus decidieran irse junto con él, al grado de quemar las banderas del Sol Azteca.

El asunto primario según Lemus, fue la falta de candidatos en las pasadas elecciones para contender  para las presidencias de Pachuca y de Mineral de la Reforma. Para él, las candidatas que impusieron desde la Dirigencia Estatal, fueron de “papel” y sirvieron solo para gastarse los recursos de campaña.

Para J. Ramón Flores el motivo fue otro, fue la deslealtad de Lemus al apoyar con su grupo al priista Arturo Gil Borja, candidato a diputado local.

Los estatutos así lo marcan, solo le faltó una patada al estilo gringo.

De tal manera, que el abandono de las filas perredistas de un número de afiliados tan significativo, debilita cada vez más al partido amarillo en Hidalgo.

La purga a la larga o te cura o te mata.

Este tipo de decisiones lo estaremos viendo de aquí al 2018 a nivel nacional, donde los intereses de los grupos sobrepasen a las del partido.

Y no solo dentro de las filas del Sol Azteca, es en general para todos los partidos políticos.

Veremos cuál es el quehacer político de Mancera, Graco Ramírez y Silvano Aureoles para homologar intereses de los grupos al interior del PRD. Cualquiera de ellos que logre conjuntar a las tribus, será el candidato del 2018.

Se observa que el que lleva mano en estos momentos es Miguel Ángel Mancera.


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