Coopelas o cuello

Como un cuento chino, donde la suspicacia y los laberintos políticos son la base fundamental de esta novela de la vida real, el chino-mexicano Zhenli Ye Gon es el principal protagonista.

Como segundo protagonista es el hoy senador panista Javier Lozano Alarcón.

La frase acuñada desde aquel julio de 2007, coopelas o cuello fue tal vez la más conocida en muchos ámbitos de nuestra sociedad.

El tiempo no perdona a nada ni a nadie.

Zhenli fue apresado y acusado en el sexenio panista de Felipe Calderón por la comercialización de acetato de pseudoefedrina, sustancia que sirve para la fabricación de metanfetaminas.

Se le incautó 19.5 toneladas de dicha sustancia en el puerto michoacano de Lázaro Cárdenas.

Más que el comercio ilegal por el que fue acusado, se dio a conocer por la cantidad de dinero en efectivo que le fue decomisado en su domicilio particular.

205 millones de dólares estadounidenses; 17 millones de pesos mexicanos; 113 mil dólares de Hong Kong; 11 centenarios; 20 mil dólares en cheques de viajero; un lote de joyas sin cuantificar y algunas propiedades con valor de más de 20 millones de pesos, entre otras cosas.

El día del decomiso se llevó a cabo una entrevista donde acusó de forma directa al hoy senador, Javier Lozano Alarcón, de haberlo extorsionado con la frase hecha popular coopelas o cuello.

En ese entonces, el chino mexicano mencionó que el efectivo decomisado era para la campaña de Felipe Calderón.

A consecuencia de tal acusación, Javier Lozano, exsecretario de Trabajo, advirtió que demandaría a Zhenli Ye Gon, pero lo más curioso de todo esto es que después de un viaje a los Estados Unidos se arrepintió de llevarlo a cabo.

Zhenli Ye fue acusado con una sola cuenta de conspiración para ayudar e instigar a la fabricación de metanfetaminas en cantidades ilegales con la intención de que sería importada a los Estados Unidos.

La demanda fue radicada en el Tribunal de Distrito de Estados Unidos para el Distrito de Columbia.

A la fecha, mantiene su inocencia y con ese antecedente de haber sido juzgado en la unión americana, los cargos aquí en México ¿de qué manera podrían juzgarse?

¿Delincuencia organizada? ¿Narcotráfico? ¿Posesión de armas de fuego? ¿Operaciones con recursos de procedencia ilícita?

Son ya casi diez años que estuvo en una cárcel americana y eso para su proceso cuenta.

En política hay un dicho común el fondo es forma.

En su momento Zhenli sostuvo que el extorsionador le mencionó que el dinero sería usado para provocar la caída del candidato opositor si triunfaba en las elecciones presidenciables en ese momento, siendo ese candidato opositor Andrés Manuel López Obrador.

Un funcionario de alto nivel, el procurador general de la República y hoy magistrado de la Suprema Corte de Justicia, Eduardo Medina Mora, fue parte importante en la llamada Operación Dragón.

Fue cuestionado en su momento por la Corte Federal de los Estados Unidos por haber ordenado la destrucción del cargamento de pseudoefedrina decomisado a Zhenli y que ellos requerían como prueba en contra.

Sobre el dinero decomisado, los fiscales americanos admitieron que era una evidencia fundamental para el juicio basándose en la presunción de que era producto de la venta de droga.

Pero ¡oh sorpresa! el dinero no estaba ya disponible porque el gobierno mexicano de Felipe Calderón lo había enviado al Bank of America en los Estados Unidos, para luego distribuirlo entre varias entidades gubernamentales.

¿Por qué desaparecieron las evidencias o pruebas fundamentales en contra de Zhenli Ye Gon?

A Javier Lozano en esos tiempos se le identificó como el director del cuarto de guerra de la campaña presidencial de Felipe Calderón, fue miembro del equipo de transición para luego ser nombrado como Secretario de Trabajo.

Hoy, el senador Javier Lozano Alarcón está más que nervioso con la extradición y tal vez, sea el que pague los platos rotos al pasar el tiempo.

Nunca interpuso demanda alguna en Nueva York o México por las acusaciones que le hizo Zhenli Ye Gon y lo peor, nunca lo desmintió legalmente.

Actualmente, Javier Lozano se encuentra políticamente hablando entre la espada y la pared, por un lado le sirve al gobernador panista con intenciones presidenciales, Rafael Moreno Valle.

Por el otro, le debe lealtad a su exjefe Felipe Calderón Hinojosa, el apoyo a la señora Margarita Zavala debe verse ante los ojos de todos.

Tanto Rafael Moreno Valle como Felipe Calderón NO aceptarán una deslealtad de Javier Lozano Alarcón y con ello si el chino mexicano estando en México y siendo juzgado de acuerdo con las leyes mexicanas, suelte la boca y con eso descarrile a los panistas, toda vez que ellos y solo ellos, fueron los creadores de tal novela.

El tiempo no perdona a nada ni a nadie.