De acuerdo con estudios del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el 60 por ciento de los más de 26 millones de estudiantes de educación básica han sufrido de acoso escolar.
El miércoles 18 de enero, un hecho sumamente violento y desconcertante conmociono al país entero, cuando en el Colegio Americano del Noreste, en Monterrey, Nuevo León, un estudiante de secundaria disparó contra tres compañeros de clase y una maestra, para después dispararse a sí mismo.
Este hecho abre de nueva cuenta el debate sobre la seguridad que existe en todas escuelas del país; aunque son pocos los casos que se han registrado en México, sirven como una alerta para las autoridades, padres y estudiantes, para que en conjunto tomen medidas precautorias y exista una vigilancia exhaustiva en torno a las escuelas y sus alumnos.
Esta tragedia nos recuerda, que no ha sido la única; hechos similares ocurrieron en años pasados en la capital del país.
Padre de familia asesina a directora
En 2007, un padre de familia ingresó armado al colegio privado Winston Churchill School, ubicado en la delegación Álvaro Obregón de la Ciudad de México, el sujeto disparó con un arma de .9 milímetros en el rostro de la directora de preescolar, causándole la muerte.
Después, se conoció que un día antes, autoridades del plantel, incluida la directora de preescolar, les habían notificado, al agresor y a su ex esposa que no darían la reinscripción a su hijo de preescolar debido al conflicto que sostenían por su divorcio, el cual afectaba al menor y su relación con la institución.
El homicida fue identificado como Fernando Marcelo Martínez González, abogado de 50 años de edad, quien cumple una sentencia de 48 años 15 días en el Reclusorio Oriente.
Dispara contra su compañera de colegio por un accidente
En 2004, en la delegación Iztapalapa, un menor de 13 años, estudiante de la secundaria Ángel Martín del Campo, disparó accidentalmente a la cabeza de su compañera de la misma edad.
La menor fue llevada al hospital, donde una semana más tarde falleció, mientras que el agresor fue llevado al Consejo de Menores Infractores, donde declaró que había adquirido el arma para protegerse de la inseguridad que se vive en la zona y había decidido llevarla para enseñársela a sus compañeros.
Se suicida frente a compañeros
En 2001, en la secundaria 163 de la delegación Iztapalapa, un estudiante de 14 años, espero la hora del recreo y tras una fuerte discusión con su novia, sacó de su mochila una pistola calibre 22 y se disparó en la cabeza.
El adolescente, fue llevado al hospital Magdalena de la Salinas, donde llegó grave, posteriormente le diagnosticaron muerte cerebral y falleció a las 24 horas de haber ingresado por un paro cardiorrespiratorio.
En una hoja de su cuaderno, las autoridades hallaron una nota donde explicaba su decisión, en esta expresó que estaba cansado y enojado de que sus papás lo regañaran por ser “flojo” y no estudiar.
La violencia emocional en casa genera agresividad en el menor en la escuela
Expertos en psicología infantil, advierten que la violencia emocional como los insultos y el menosprecio en el núcleo familiar pueden ser factores que desencadenen que un menor se vuelva agresivo para con su entorno.
El psicólogo Christian Morales Santana enfatizó que, aunque los padres de familia no recurran a la violencia física, las palabras y expresiones de menosprecio tienen repercusiones graves en la conducta de los infantes:
“Los padres y madres, en ocasiones, llegan a propiciar la violencia de los niños; esto no quiere decir que hayan sido violentos entre ellos, sino que habrá ocasiones y expresiones que lastimen la autoestima de un niño. Este tipo de situaciones llegan a generar que el menor llegue a vincularse a través de la violencia", advirtió.
El especialista en conducta infantil propone a los padres que, ante cualquier cambio de actitud del menor, que puede ser tristeza, euforia, enojo, bajas calificaciones, aislamiento, problemas con compañeros de clases, se debe acudir con un especialista en la materia.
“No nos damos cuenta qué es lo que está sucediendo con el pequeño. Debemos estar pendientes del trato con las maestras, los compañeritos del centro educativo, incluso en la dinámica familiar, porque esto nos indicaría si se retrae, si comienza a ser un niño que no convive con otros chicos y chicas, si sufriría un tipo de abuso en casa o en la escuela”.
Morales Santana recomendó a los padres llevar a sus hijos, aún sin que presenten algún cambio de actitud, a una evaluación psicológica para conocer el estatus emocional de sus hijos: ‘todos nacemos con cierto grado de agresión, y es en la infancia cuando se determinan los límites para integrarse con las personas’, recalcó el especialista en menores.
Primer lugar en bullying
En 2016, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), aseguró que México se encuentra en el primer lugar en acoso escolar en el mundo. Las cifras aseguran que cada cinco de cada 10 alumnos agreden dentro y fuera de los planteles educativos en el país.
De acuerdo con cifras de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), el acoso escolar se ha incrementado un 10 por ciento en los últimos dos años, asimismo se ha convertido en un problema grave que el Gobierno de México enfrenta, cuyas medidas no han dado el resultado que se esperaba.
La Dirección General de Prevención del Delito de la Procuraduría General de la República señala que uno de cada 6 jóvenes víctimas de acoso escolar se suicida. “Nosotros hemos tratado a chiquitos de 7 y 8 años que intentaron suicidarse por acoso escolar, hoy están en atención”.
Detalló que de acuerdo con estudios del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el 60 por ciento de los más de 26 millones de estudiantes de educación básica han sufrido de acoso escolar.
Programas inservibles
Los programas enfocados en la seguridad escolar que se han aplicado en México desde hace diez años, no han entregado resultados ni tienen objetivos medibles.
Estos programas se reactivan cuando sucede una tragedia como la de Monterrey, Nuevo León, en este caso tan deplorable, como otros que se mencionan, la respuesta de las autoridades fue reactivar el Operativo Mochila Segura que consiste en revisar las mochilas de los estudiantes en los planteles escolares.
Esta medida se unió al Programa Escuela Segura del gobierno federal en 2007, desde ese entonces, organizaciones civiles denuncian que viola el derecho a la intimidad, a la seguridad jurídica, a la no discriminación y el interés superior de la infancia.
“La aplicación del operativo no previene (la violencia) ni protege a niñas, niños y adolescentes”, señaló la Red por los Derechos de la Infancia en México después de que el presidente Enrique Peña Nieto ordenó profundizar las medidas y protocolos vinculadas a la revisión para inhibir la portación de armas en las escuelas.
Hace una década varias organizaciones civiles y defensoras de derechos humanos, encabezadas por la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, publicaron un desplegado advirtiendo que esa clase de operativos atentan contra el derecho de la niñez a decidir sobre los asuntos que los afectan, a su intimidad, respeto y dignidad, según la Convención Internacional de los Derechos del Niño.
“Algunas de las acciones pueden terminar criminalizándolos a través de medidas de vejación, de cateo y de revisión, afectando con ello el derecho a la privacidad, a la intimidad y a no ser molestados en su persona. Someterlos a este tipo de medidas es ubicarlos y reducirlos como centro del problema, sin tomar en cuenta la visión integral del mismo”, señalaron.
Sin embargo, las autoridades defienden la medida bajo el argumento de que los operativos se realizan a petición de las autoridades escolares y bajo la autorización y presencia de los padres de familia.
Después de la tragedia quieren Mochilas Seguras
De acuerdo con autoridades capitalinas, el operativo Mochila Segura se reforzó en las más de 8 mil escuelas públicas y privadas de la Ciudad de México con la presencia 12 mil policías de distintos agrupamientos.
Tras el ataque ocurrido el miércoles 18 de enero en una escuela de Monterrey, el jefe de la policía capitalina, Hiram Almeida, dijo que se pondrá énfasis en que los alumnos no entren con objetos que puedan ser utilizados para agredir.
Sin embargo, las autoridades se encontraron con sorpresas: en el primer día del operativo, a un alumno de secundaria se le detectaron unas tijeras en su mochila, las cuales le fueron retiradas.
En otra escuela secundaria, policías capitalinos aseguraron a un alumno de 13 años tres pipas con mariguana y tapones de plumas que presuntamente se utilizaban como pipas.
Después del hallazgo, de acuerdo con fuentes policiales, el adolescente fue llevado a la Fiscalía para Menores.
Un estudiante de 18 años de edad fue puesto a disposición ante el agente del Ministerio Público por portar una pistola deportiva dentro de un plantel de educación media superior.
Supervisa Sedagro y PNUD avance de ollas de captación de agua en Coajomulco
Marco Rubio asegura que cárteles del narcotráfico socavan al Gobierno de México
Puntualiza Alejandro Encinas que Hidalgo es clave en el Plan Hidrológico de la Zona Metropolitana
Mauricio Kuri y Macías Olvera refuerzan micromovilidad en Querétaro
Insta Joe Biden a estadunidenses a ponerse en guardia
Podrían sufrir comerciantes del Centro Histórico por pago de impuestos y servicios durante primeros meses del 2025: Juan Ayala