4 sorbos a metanfetamína líquida mataron a un joven mexicano en la frontera

Años después de la muerte de un adolescente en la garita de San Ysidro, California, se conoce el video en el que se le observa bebiendo metanfetamina líquida frente a dos agentes fronterizos que le habrían hecho beber del envase.

 El mexicano Cruz Marcelino Velázquez Acevedo, de 16 años, se veía muy nervioso cuando estaba en la garita de San Ysidro, California, frente a dos agentes fronterizos que agitaban dos botellas con una extraña sustancia de color ámbar que él llevaba en una mochila. Ante la sospecha, una oficial le acercó al chico un envase y le hizo una seña que parece alentarlo a beber su contenido.

Velázquez Acevedo, residente de Tijuana, México, terminó bebiendo el líquido en cuatro ocasiones y cuando les regresó la botella, los dos oficiales aparentemente sonríen divertidos y se ven uno al otro.

Esta escena se observa en un video de seguridad obtenido por la cadena ABC y revela la dramática muerte de Velázquez Acevedo, quien había declarado a los agentes de la Oficina de Aduanas y Control Fronterizo (CBP) que llevaba "jugo de manzana", pero en realidad era metanfetamina líquida.

Los paramédicos que acudieron para auxiliar al joven tuvieron que sedarlo antes de transportarlo con esposas al centro médico Sharp Chula Vista, donde falleció dos horas después, justo antes de las 9:00 de la noche del 18 de noviembre de 2013.

A pesar de que la familia del adolescente recibió en enero una compensación de un millón de dólares y de que el caso ha sido revisado por la CBP y la Fiscalía federal, los oficiales Valerie Baird y Adrian Perallon continúan siendo oficiales fronterizos y no han sido sancionados.

El agente Perallon declaró sobre este incidente el 10 de mayo de 2016 que "nunca se lo pedí, (el chico) lo hizo voluntariamente", mientras su compañera Baird dijo estar "segura" de que no le ordenó al adolescente beber el narcótico en más de una ocasión. "Noté que tenía problemas de respiración y que temblaba mucho. Recuerdo haberle puesto mi mano y le dije 'relájate'", expresó con lágrimas.

Cruz Marcelino ingirió una sustancia que en un 90% contenía metanfetamina líquida. Por eso, de inmediato comenzó a agitarse y gritó "¡mi corazón!". Dos horas después, el joven perdió la vida convulsionándose en un hospital de Chula Vista. A los detectives les confesó que había tomado un "químico".