Recuperar la confianza de los ciudadanos, el reto tricolor

El pasado sábado 12 de agosto se llevó a cabo la Asamblea Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), en donde, a un año de las elecciones presidenciales y gobernando 16 entidades de la República, entre ellas el Estado de México, el partido tricolor no tuvo otra opción que enfrentarse a sí mismo para cambiar su rostro.

En esta ocasión, el partido no se enfrenta únicamente a sus adversarios políticos, sino a una ciudadanía recelosa de la clase política y sus intenciones.

El reciente triunfo de Alfredo del Mazo en las elecciones del 4 de junio pasado por la gubernatura del Estado de México no es sinónimo de la simpatía de los ciudadanos por el partido que se encuentra en el poder desde hace 88 años, ya que de manera inédita, a pesar de llevarse la corona, por sí solo el PRI obtuvo menos votos que Morena, por lo que el triunfo se debe a la alianza con el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), el Partido Nueva Alianza (PANAL) y a Encuentro Social (PES).

Por mérito propio el tricolor obtuvo 1 millón 805 mil 745 votos; Morena tuvo 1 millón 871 mil 542 votos. El PRI quedó por debajo de su contrincante por 65 mil 797 sufragios.

Al final del día, del Mazo fue proclamado Gobernador Electo gracias a los 234 mil 964 votos que le dieron sus aliados. En total, consiguieron 2 millones 40 mil boletas.

Al tratarse el Estado de México, del bastión priista, el tricolor se ve obligado a reconectarse con los sectores sociales para posicionarse rumbo a las elecciones presidenciales de 2018, en donde se jugará su permanencia en el poder.

El problema de la unidad

Para la exdirigente del PRI en el Estado de México, Alejandra Del Moral Vela, quien dejó el cargo el pasado martes, el verdadero reto para los priistas en la entidad es mantener la unión y trabajar para consolidar al tricolor como el mejor partido del país.

Asegura que el PRI en la entidad está listo para enfrentar las demandas de una sociedad sedienta de resultados, y maneja como prueba de esto las modificaciones que se llevaron a cabo en los Documentos Básicos del partido en la XXII Asamblea Nacional, los cuales permitieron incorporar a los Estatutos y al Programa de Acción lo que la gente requiere para resolver sus necesidades.

Si bien el triunfo de Del Mazo sirvió para dar una bocanada de aire al PRI nacional, como ya se ha mencionado antes, la victoria del tricolor en la entidad no se dio por mérito propio sino por la coalición con el PVEM, PANAL y PES.

A pesar de ello, Del Moral aseguró que este vencimiento demuestra que la voluntad mayoritaria se gana con trabajo constante, unidad, capacitación de la militancia, cercanía social… y unos cuantos aliados.

Previo a la separación de su cargo, la exdirigente del PRI en el Estado de México consideró que la Asamblea Nacional daría al partido, tanto nacional como en la entidad, la oportunidad de pararse frente a la sociedad mexicana como un partido preparado que atiende y renueva su proyecto al escuchar la voz de todos.

Haciendo tal vez referencia al que pudo considerarse su mayor contrincante en las elecciones de 4 de junio pasado, Morena, Alejandra del Moral expresó que las elecciones se ganan con trabajo en unidad y no con marchas ni plantones y que, precisamente por eso, el tricolor volverá a ganar en las elecciones de 2018.

Un reto importante al que se enfrenta el PRI en el Estado de México, y también a nivel nacional, es el de recuperar la confianza de la gente. El libro “El Priista que todos llevamos dentro” explica que el los líderes de este partido están acostumbrados a ser gobierno, lo que no los lleva a pretender ostentar la Presidencia, sino a creer que lo merecen.

De acuerdo con información de El Zócalo, la especialista y ex asesora del Gobierno de Chihuahua, Kenny Denisse Arroyo González, detalla que este comportamiento mantiene al tricolor alejado de sus propios militantes y por lo tanto, de los votantes. Unos votantes que en el contexto actual del país buscan un cambio, una solución.

Los ciudadanos, molestos con el sistema político buscan un cambio y ese cambio viene acompañado por un mesías, un rebelde con el que las votantes se sienten identificados ya que habla su mismo idioma.

De la mano de Andrés Manuel López Obrador, este panorama empieza a poner nerviosos a partidos tradicionales como el tricolor, la especialista asegura que Morena entiende el estado de ánimo del país y ha sabido aprovecharlo para construir el mensaje correcto y que conecte con la población”.

Para muestra un botón, como en el caso de la ex candidata al gobierno del Estado de México, Delfina Gómez, quien con su ya famoso “súper requeté bien” puso a temblar a sus contendientes.

Un problema encarnado en la entidad

De la mano de todo lo anterior se encuentra la grave plaga de corrupción que inunda al Estado de México.

En abril de este año, Opciona presentó una tabla que pretende dar seguimiento a la implementación de los Sistemas Locales Anticorrupción en las 32 entidades el país.

Al 17 de agosto de 2017, Opciona calificó al Estado de México como una de las entidades en la que se empieza a trabajar en la Reforma Constitucional y en la Ley Local, lo que lo traduce como un estado que todavía está a tiempo de combatir la corrupción.

Durante la Asamblea Nacional del PRI, se urgió a rechazar y a combatir la corrupción y la impunidad, en contraste, la entidad es testigo de graves casos de corrupción, entre los que destacan los audios, divulgados de manera anónima, en los que ejecutivos acordaban supuestos aumentos de peaje en autopistas de la entidad a cambio de pagar la vacaciones de un funcionario estatal.

Derivado de este problema Apolinar Mena Vargas, secretario de Comunicaciones de la administración de Eruviel Ávila, tuvo que dejar su cargo. Pero quitado de la pena y como si nada hubiera pasado, cuatro meses después regresó al gobierno estatal como secretario técnico del gabinete.

Por otro lado, la organización AHORA denunció ante el Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (Trife), la supuesta transferencia ilegal de mil 600 millones de pesos de recursos del programa de rescate carretero para la campaña de Alfredo del Mazo en la pasada elección. La denuncia afirma que este caso también se dio durante las campañas de Enrique Peña Nieto y Eruviel Ávila por la gubernatura de la entidad.

Por su parte, el gobernador del Edomex asegura que se trabaja en el combate a la corrupción, en el fortalecimiento de la transparencia y en el Estado de Derecho.

A penas el 27 de julio pasado tomó protesta José de la Luz Viñas Correa, como el primer Fiscal Anticorrupción en el Estado de México, quien cuenta con total autonomía para prevenir y sancionar actos de este tipo.

Sin embargo, la entidad aún tiene un largo camino que recorrer antes de poder extirparse este problema que ha llevado al PRI a perder la confianza de la gente y que casos como el del exgobernador de Veracruz, Javier Duarte, no hacen más que empeorar la situación.