Candidaturas confrontan a los priistas poblanos

Los priistas locales celebraron públicamente las decisiones tomadas en la XXII Asamblea Nacional; sin embargo, saben que el nuevo escenario dibujado rumbo a la elección de 2018 genera afectaciones en sus carreras políticas.

Cuando en su oportunidad fueron interrogados por reporteros, los poblanos que militan en el PRI, como sucedió en todo el país, festejaron la aprobación de la propuesta del delegado José Ramón Martell de reformar el Artículo 166 de los estatutos para postular a un candidato ciudadano, siempre y cuando esté comprometido con la Declaración de Principios y el Programa de Acción, y tenga niveles de reconocimiento y aceptación superiores al de militantes que aspiran al mismo cargo; además de obtener la aprobación de la Comisión Política Permanente (CPP).

La resolución no sólo aplica en la candidatura a la Presidencia de la República, sino también a gubernaturas, diputaciones federales y senadurías, legislaciones locales, presidentes municipales e integrantes de cabildos, con la salvedad que las tres primeras serán aprobadas por la CPP y el resto por acuerdos de los organismos locales, los cuales deberán de contar con la autorización del Comité Ejecutivo Nacional (CEN).

A una semana de tomar esta medida, nadie ha hecho eco de la posición asumida por Ulises Ruiz Ortiz, exgobernador de Oaxaca, respecto a rechazar la propuesta de buscar candidatos externos, ni siquiera porque fundada su planteamiento en el respeto a la militancia.

Nadie ha recordado que, según el ex mandatario oaxaqueño, los priistas están "hasta la madre" de las imposiciones, tampoco que dijo: “Lo que tenemos que hacer es consultar a la militancia: quienes quieren que sean sus candidatos y no abrir los candados, no quitar requisitos para recibir a cualquiera, sin compromiso ideológico, sin compromiso con la militancia”.

“Veo como positivo que mi partido se modernice y se abra a la sociedad”

Por el contrario, el delegado del IMSS, Enrique Doger Guerrero, consideró positivo que su partido abra las puertas a ciudadanos para ser postulados como candidatos a la Presidencia de la República y gubernaturas; pero, a la par, también dijo que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) no puede equivocarse en la elección de su abanderado, porque los electores no perdonarían.

“Yo veo como positivo que mi partido se modernice y se abra a la sociedad, no hay que tenerle miedo a la competencia, al contrario, darle respuesta a los ciudadanos, y además, con candidatos tanto militantes como ciudadanos sean competitivos y que brinden una respuesta a los problemas de la sociedad es importante”.

Incluso, el ex candidato a gobernador en 2010, Javier López Zavala, consideró que los cambios estatutarios establece "reglas claras" para mantener la unidad de la militancia, lo que le permite estar más unido que el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), a cuyo Andrés Manuel López Obrador buscó para negociar alguna postulación.

"He escuchado voces ocultas que no están muy de acuerdo con el procedimiento (en Morena). En el PRI estamos avanzando bien y creo que tenemos la gran oportunidad de seguir en la Presidencia de la República”, comparó.

En este sentido, según la también abanderada a la gubernatura Blanca Alcalá Ruiz, la Asamblea Nacional recuperó un ideal un claro ejemplo de que cuando el PRI recupera su filosofía, su origen, su mística, que tiene que ver con esa capacidad de inclusión y respeto a todas las voces, cualquier objetivo que se trace, podrá cumplirse.

“El PRI tiene esa fortaleza, una gran fortaleza de tener muchos actores importantes, para sacar esta importante responsabilidad”, dijo la recién nombrada embajadora de México en Colombia, quien en conferencia de prensa evadió pronunciarse por algún aspirante en especial.

“Si el PRI quiere ganar el 2018 debe haber una consulta a la base”

Con esta misma perspectiva, el diputado federal, Víctor Manuel Giorgana Jiménez, subrayó que la militancia mantiene la toma de decisiones, pese a que las reformas permiten la igualdad de condiciones para externos e internos, pues al final ambos deben ser aprobados por el CEN.

Sobre el particular el subsecretario de Desarrollo Urbano y Vivienda de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Juan Carlos Lastiri Quirós, destacó la apertura del PRI a la sociedad: "no le debemos vuelta al asunto si el PRI quiere ganar el 2018 en Puebla debe haber una consulta a la base, que sea el mejor o la mejor la que nos represente pero mediante una consulta a la base".

La elaboración de una agenda ciudadana, el reconocimiento a las mujeres y a los jóvenes y la necesidad de la transparencia.

Empero, remarcó: "no le debemos vuelta al asunto, si el PRI quiere ganar el 2018 en Puebla, debe realizar una consulta a la base, que sea el mejor o la mejor la que nos represente, pero mediante una consulta a la base".

En contraposición, Giorgana Jiménez consideró "casi imposible" que este método sirva para elegir al candidato a gobernador, pues no habrá tiempo ni condiciones para realizar este proceso; en cambio, se pronunció a favor de asamblea de delegados, mesa de concertación, así como el de usos y costumbres, para tener manejo estratégico y lograr la unidad.

En este punto, Doger Guerrero no rechazó del todo a la consulta a la base, pero recordó que el método debe ser aquel que genere unidad, para obtener buenos resultados en el proceso electoral que se llevará a cabo el próximo año.

Entrevistada por separado, Alcalá Ruiz se abstuvo de opinar sobre este proyecto que ha enarbolado el funcionario federal en tanto su correligionario propuso analizar todos los esquemas.

Recienten los cambios de la asamblea priista

Por otra parte, el líder de la Red de Jóvenes por México en Puebla, Lorenzo Rivera Nava, refirió que entre las decisiones priistas también estuvo la necesidad de cumplir con la paridad de género, por lo que entregará 30 por ciento de sus candidaturas a menores de 35 años de edad.

Por lo anterior, el dirigente no descartó la posibilidad de que haya candidatos externos, no sólo por edad, sino también porque es necesario que este porcentaje sea cubierto por la mitad de mujeres.

En este tenor, el diputado local Francisco Javier Jiménez Huerta comentó que, ante este nuevo panorama, es obligada la invitación a jóvenes simpatizantes y sin militancia priista, para analizar posibles candidaturas.

Asimismo,  la regidora poblana, Karina Romero Alcalá,  consideró muy interesante que su partido quiera renovarse: "en varias ocasiones he mencionado que el PRI y todos los partidos necesitan volver a ganarse la confianza de la gente”, refirió.

Sin embargo, lo que más preocupa a los priistas ya no tiene que ver con la paridad de género ni siquiera con el tema de la edad, ni mucho menos la declaración 3 de 3, sino con el tema de que los legisladores que hayan asumido el cargo por representación proporcional no tendrán la posibilidad de participar en una próxima elección por esta misma ruta.

Para Jiménez Huerta, este candado aplicará hasta el próximo proceso electoral, pues, desde su perspectiva, no puede ser retroactivo; "esta reforma aplica hasta 2018, para quienes sean electos por la vía plurinominal en 2018", pues no puede hacerse de manera retroactiva, dijo.

Hasta el momento no ha sido aclarado este punto en el instituto tricolor, por lo que uno de los personajes locales que resultaría afectado sería el diputado local Leobardo Soto Martínez quien no descartó la posibilidad de impugnar este candado porque "no se pueden frenar las aspiraciones de nadie".

El líder en Puebla de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) admitió que esta restricción, si bien fortalece al PRI, "no puede frenar las aspiraciones de nadie, como tampoco el derecho a votar y ser votado", como lo establece la Constitución Mexicana.

En teoría, los priistas avalan las decisiones tomadas por su partido, consideran que se acerca a la sociedad, que reflejan apertura y sensibilidad... sin embargo, la opinión cambia cuando esos cambios estatutarios impiden la continuidad de sus carreras políticas.