Revictimiza Estado a familiares de 43 normalistas desaparecidos: Fundar

El Estado revictimizó a los padres y familiares de los 43 jóvenes normalistas de Ayotzinapa con la difusión de la denominada “verdad histórica” de la Procuraduría General de la República (PGR), que concluye que estos fueron secuestrados en Iguala e incinerados en el basurero de Cocula, Guerrero.

Así lo concluye el informe “Yo solo quería que amaneciera. Impactos sociales del caso Ayotzinapa” presentado este miércoles por la organización Fundar, Centro de Análisis e Investigación, en el cual se expresa su preocupación por la falta de voluntad del Estado mexicano para esclarecer los hechos del 26 y 27 de septiembre de 2014.

Ximena Antillón, coordinadora del proyecto, advirtió que la impunidad, la revictimización y el impacto traumático, junto a la pérdida de la función protectora del Estado, son algunos de los efectos negativos que han padecido los familiares y víctimas del caso de los 43 normalistas desaparecidos.

A lo largo de año y medio de trabajo, un equipo de médicos, psicólogas y una antropóloga llevaron a cabo 64 entrevistas a distintos grupos de afectados.

Además de los familiares de los desaparecidos, que padecen un "duelo congelado", el informe explica que los estudiantes que sobrevivieron a esa fatídica noche, en la que también murieron seis personas, entre ellas tres estudiantes, enfrentan hoy la llamada "culpa del sobreviviente", así como el dolor por la ausencia de sus compañeros.

Ulises Martínez Juárez, uno de los jóvenes supervivientes de esta trágica noche, reconoció que desde entonces "no es fácil salir a trabajar o a estudiar, sin saber de los compañeros", pues les embarga un sentimiento "muy doloroso".

A su vez, Hilda Hernández, madre de uno de los 43 jóvenes desaparecidos, declaró: "No tenemos una vida, nos vamos muriendo poco a poco al no saber de nuestros hijos. Todo lo hemos hecho por amor".

De acuerdo con la versión oficial, la noche del 26 de septiembre policías corruptos de Iguala arrestaron a los jóvenes y los entregaron a miembros del cártel Guerreros Unidos, que los asesinaron e incineraron sus restos en un basurero del municipio de Cocula.

"Al Gobierno no le importa seguir diciendo mentiras y dándonos dolores en lo más profundo de nuestro ser", denunció la señora Hilda.

La reciente detención de Erick Uriel Sandoval, alias "la Rana", presuntamente involucrado en el caso y presente en el basurero, abundaría en esta línea de investigación, la cual ha sido muy criticada por padres y organismos civiles.

"El antes y después está marcado no solo por los hechos traumáticos, sino por la respuesta que el Estado da", lamentó el director del Centro Prodh, Mario Patrón.

Los padres de los 43 normalistas se han convertido en la "piedra del zapato" del Gobierno, pues siguen exigiendo verdad y justicia y se niegan a aceptar cualquier tipo de compensaciones.