Una fiesta privada se realizó al interior del Acuario de Veracruz, en la sala de la pecera oceánica, sin tomar en cuenta a las especies marinas que ahí habitan.
Justo en la zona donde está prohibido tomar fotografías con flash, hubo luz y sonido, además de efectos que alteraron a los animales bajo la tutela de las autoridades del espacio para la conservación natural.
‘Lamentamos el manejo del Acuario de Veracruz con intereses particulares. Revisaremos el reglamento que lo opera y responsabilidades del Consejo de Administración privado’, destacó el gobierno del Estado.
El alcalde Fernando Yunes también se lavó las manos: El acuario de Veracruz no es administrado por el Ayuntamiento ni tenemos relación de ningún tipo.
El acuario no emitido ningún posicionamiento al respecto y tampoco ha habido ninguna mención por parte de los administradores del recinto.