Tres heridos por riña y enfrentamientos en Penal de Cuautitlán

Un reo y dos custodios resultaron heridos en una riña que se suscitó en el interior del penal de Cuautitlán, en tanto que en el exterior, familiares que se encontraban en espera de informes sobre infectados por coronavirus, se enfrentaron con policías antimotines que los desalojaron de la puerta de la cárcel.

El subsecretario de Control Penitenciario de la Secretaría de Seguridad, Manuel Palma Rangel, indicó que todo inició alrededor las 17 horas, cuando unos 130 reos estaban tomando su hora de patio en el área de procesados.

Los privados de su libertad de dos módulos se relajaban cuando uno de ellos se auto agredió al cortarse una vena, lo que suscitó una riña entre dos reos, en tanto que otros intentaron intervenir para separarlos, en el momento que ingresó personal médico para atender al herido.

El funcionario agregó que los 130 presos aprovecharon la situación para negarse a regresar a su estancia, y manifestaron estar en contra de la cancelación de la visita familiar, medida asumida por las autoridades para evitar más afectados por coronavirus.

El sistema Penitenciario y la Secretaría de Seguridad habían decidido la cancelación de las visitas familiares para salvaguardar la salud de los privados de la libertad, por esta pandemia, reiteró Palma Rangel.

Indicó que una hora y media después todos los privados de la libertad estaban en sus estancias, mientras que fueron llevados a un hospital para su atención, el privado de la libertad que se autoagredió, junto con otros dos custodios que están golpeados.

El centro penitenciario de Cuautitlán tiene capacidad para 351 personas, pero están confinados 1,537 reos, por lo que su nivel de hacinamiento rebasa su capacidad, en tanto menos del 10 por ciento de la población penitenciaria estuvo implicada en los problemas de hoy.

Los familiares, en espera de la información en el exterior, resistieron la llegada de un grupo de aproximadamente 200 policías antimotines que los desalojaron por la fuerza de la puerta, forcejeando, y a golpes de los dos bandos.

Desde la madrugada del martes, un grupo de mujeres fue reubicado a otro penal, para que sus sitio fuera usado para la atención de los reos que están siendo afectados por un brote de coronavirus.