Es determinante para los infantes que desde su nacimiento y durante seis meses, se mantenga la lactancia materna.
Actualmente, más del 70 por ciento de los hogares en las zonas rurales sufren de inseguridad alimentaria y alrededor del 55 por ciento en las urbes también lo padecen.
No obstante, la pandemia de covid-19 duplicará estas cifras, afectando a un mayor número de familias con hambre y desnutrición, advirtió Anabelle Bonvecchio Arenas, directora de Investigación en Políticas y Programas de Nutrición del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).
Por lo anterior, señaló que es determinante para los infantes que desde su nacimiento y durante seis meses, se mantenga la lactancia materna, para protegerlos de padecer sobrepeso, obesidad, infecciones y todo tipo de enfermedades crónico degenerativas.
La especialista del INSP reiteró que la Organización Mundial de la Salud (OMS) sostiene que con todas las medidas de higiene y prevención, usando cubrebocas, la lactancia materna se debe mantener a pesar de que la madre, sea un caso sospechoso o confirmado de covid-19.
“Muchas mujeres tienen el temor de que no pueden amamantar a sus bebés. A la fecha no hay evidencia de que a través de la leche materna se pueda transmitir el virus del SARS-CoV-2, esto podría cambiar, pero hasta el momento la recomendación es continuar con la lactancia materna”, señaló.
Información: Excélsior
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