Héctor Astudillo informó que en el jaripeo participaban más de 500 personas, mismas que fueron dispersadas.
Autoridades estatales y federales dispersaron una fiesta en Puerto Marqués, Guerrero, donde se realizaba un jaripeo sin medidas sanitarias para prevenir el COVID-19.
El gobernador Héctor Astudillo informó que en el jaripeo participaban más de 500 personas, mismas que fueron dispersadas.
El desalojo de la fiesta, ocurrido la noche del miércoles, fue realizado en un operativo conjunto entre la Secretaría de Seguridad Pública Estatal, el Ayuntamiento de Acapulco, la Semar y la Guardia Nacional.
El gobernador de Guerrero condenó la realización de eventos masivos en el marco de la pandemia de COVID-19.
Afirmó que “frenar el alza de contagios depende de la consciencia de todos”.
Actualmente Guerrero se encuentra en Semáforo Amarillo por COVID-19, con 46 mil 275 casos confirmados acumulados y 4 mil 639 defunciones.
Información: López-Dóriga
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