Contaminación de barrancas y ríos amenaza para la calidad del agua

Las barrancas de Cuernavaca y los ríos de Morelos han sufrido por años la invasión de la mancha urbana, que aparte de devastarlas las contamina con el vertedero de basura y descargas de aguas negras que van a parar a los afluentes, con el riesgo de que los aledaños utilicen el líquido y afecte su salud.

Basura, aguas negras y materiales tóxicos son los principales agentes que han convertido a las barrancas de Cuernavaca en un foco rojo para las especies que las habitan, así como para sus visitantes, quienes sufren el riesgo de contraer enfermedades por su alto nivel de contaminación.

Barrancas con alto índice de contaminantes: UAEM

Investigadores de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) señalan que se han extinguido los cangrejos barranqueños, además de 20 especies de plantas y peces, sin que la situación incite a las autoridades a rescatar los mantos acuíferos.

En la capital existen 200 barrancas, las cuales se han convertido en los basureros más grandes y los drenajes más dañinos de la ciudad.

De acuerdo con un estudio realizado por Alicia Batllori Guerrero, del Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias de la UNAM, con sede en Cuernavaca, las barrancas se encuentran en situación precaria frente a los riesgos de lluvias intensas, debido a la gran cantidad de basura depositada en ellas.

A eso se le añaden miles de tubos de descargas de aguas negras que provienen de casas-habitación, hoteles, restaurantes, y que contaminan los cauces.

En general, dice el documento, son usadas como drenajes por las comunidades asentadas en las laderas y en las cercanías de los márgenes de las mismas.

Y en forma extrema se utilizan como tiraderos de desechos al aire libre. Así, en muchas de ellas, se pueden identificar cloacas de alto peligro para la salud pública, que en temporadas de estiaje contienen una gran cantidad de bacterias coliformes (organismos que acarrean serios problemas de salud).

Grave contaminación en los ríos Apatlaco y Cuautla

Hace 40 años se detectó una problemática en los ríos ante la falta de plantas de tratamiento, las que operan no lo hacen bien por falta de recursos y por la falta de capacidad de los municipios.

Pero los ríos, Apatlaco y Cuautla, son los más afectados por la insuficiencia de estructuras de saneamiento, motivo por el cual no es posible sancionar a quienes afectan estos caudales.

En lo que respecta a la cuenca del Apatlaco, 90 por ciento de los contaminantes procede de descargas de aguas residuales de Cuernavaca, Jiutepec, Temixco y otros municipios.

La pérdida del afluente ha cancelado la producción de cultivos que generan riqueza y desarrollo en buena parte de la entidad.

De las 4 mil 300 plantas tratadoras de aguas residuales en el país, hay una capacidad instalada de tratamiento corta, al no operar las plantas de tratamiento de manera adecuada, la contaminación es casi la misma en todos los ríos de Morelos.

A nivel de municipios solo 20 por ciento de los líquidos residuales son tratados, 80 por ciento suele vaciarse en arroyos, canales y ríos. Y a pesar del sistema de monitoreo, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) adolece del capital humano e instrumental suficiente como para poder mantener una vigilancia estricta en el cuidado del agua.

Autoridades de Morelos anunciaron los beneficios que traerá la Ecozona que construirán en el centro de la capital.

El titular de la Secretaría Desarrollo Sustentable (Sedesu) Topiltzin Contreras MacBeath aseguró la construcción de esta Ecozona, la cual traerá el rescate de las especies que habitan en las barrancas y mejor calidad de aire y el agua.

"Cuernavaca como ciudad piloto con Ecozona busca tener una mejor salud ambiental y definir el uso de suelo (usos mixtos), a través de desarrollo de edificios en que funcionen comercios, oficinas y viviendas de tal manera que compactemos la ciudad”, puntualizó.