La Iglesia, legionarios de cristo y escuelas Montessori, el caldo de cultivo.
El caso Montessori de abuso sexual infantil es el resultado de estructuras que operan desde las instituciones, ya sea Iglesia, Legionarios de Cristo o en los centros educativos. Estos últimos dejaron al descubierto el abuso concertado que sólo es posible su existencia bajo un sistema permisivo. Los familiares de niños con edades de entre 3 y 5 años habían denunciado una serie de abusos a sus hijos, que consistían en golpes, obligarlos a comer heces fecales y sexo oral.
Lo emblemático de los casos de pederastia en el kínder Montessori Matatena es que por primera vez las víctimas salen a la calle, se manifiestan en la Secretaría de Educación Pública (SEP), ante la Procuraduría General de la República (PGR) y en las calles, mostrando su rostro, aquel que estuvo oculto cuando los abusos desde la Iglesia y otras instituciones estigmatizaban a las víctimas.
Desde diciembre de 2015, los padres de familia interpusieron una demanda que evidenció a las distintas esferas de poder; incluso el Secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño ofreció disculpas por el burocratismo institucional, pero también el gobierno capitalino y los órganos de justicia correspondientes tardaron en reaccionar.
La Iglesia, escuela del abuso
En cuanto a la pederastia sistémica de la Iglesia, ésta sigue impune: “No ha habido avances en materia de justicia a las víctimas, sólo se ha avanzado en el manejo de los casos para hacerlos más sigilosos”, advierte el ex padre y activista social, Alberto Athié, quien narra un caso reciente: “Le ofrecí apoyo –con respeto– al papá, que está devastado. Estaban llevando a su hijo a que se preparara para la Primera Comunión y él niño decía que no quería ir, pero el papá le insistió en que se tenía que preparar y asistir. En una ocasión se les olvidó el suéter del hijo en la casa, entonces el papá se lo llevó y al entrar, vio cómo el cura estaba abusando del niño en la Iglesia, ayudado por la religiosa, y como se le aventó a golpes al cura, pues lo detuvieron”. Alberto Athié llegó del mundo secular al religioso y luego ingresó al seminario para dedicarse a trabajar en las zonas marginales. El entonces cura fue quien entró en contacto con el primer caso de un legionario de cristo que se encontraba muy enfermo en el Hospital español, la gente que le había pedido acercarse a Juan Manuel, le habían advertido que quizá podría estar desvariando “porque decía cosas terribles contra el padre Maciel que él se las había estado guardando no sé cuánto tiempo”.
“Cuando fui a verlo, me pregunté si me estaba hablando de Maciel, de este gran misionero junto al papa; porque en ese tiempo Maciel no era un sacerdote más”, dijo Alberto Athié, quien dudó de la confesión: “Pero como sacerdote no me tocaba juzgar, sino ayudar a que él vaya a acercarse a Jesús e hiciera un proceso de conversión. En ese proceso él me dice: ‘Yo sé que voy a morir pronto, no quisiera morir con resentimiento, pero tampoco quisiera simplemente perdonar y ya. Este padre Maciel destruyó mi vida y quiero justicia’.
Alberto Athié dice a Megalópolis: “Fue un momento muy duro para mí, lo abracé y le pedí perdón a nombre de la Iglesia. Y después me dijo, quiero pedirte que cuando yo muera seas tú el que celebre la misa de cuerpo presente y que le digas a la gente que yo he perdonado, pero que pido justicia”. Athié había visto a Juan Manuel en diciembre de 1994, después se enteró que buscó la comunión en Navidad y murió en febrero de 1995.
Cuando el entonces cura Alberto Athié celebró la misa, dio el mensaje a nombre de Juan Manuel sin referirse al padre Maciel, cuando observó que ocho hombres comenzaron a sonrojarse y llorar. Al término de la misa éstos se acercaron para decirle que ellos también habían sido víctimas de Maciel.
Educar y abusar en Montessori
En los centros educativos Montessori se ha presentado lo mismo maltrato físico infantil de parte de una maestra que fue videograbada golpeando a un niño, como el secuestro de un menor y los recientes casos de pederastia del colegio Montessori Matatena.
La senadora independiente Martha Tagle, se refiere a este caso como no terminado con la sola detención del presunto responsable, el 10 de mayo pasado:
“Debería haber personal especializado en la Procuraduría del Distrito Federal, que atendiera de manera inmediata, que valorara las pruebas que tiene en la mano, que no victimizara a los menores que fueron violentados y que se instaure un protocolo que tenga como fin el interés superior del niño para priorizar sus derechos”.
La senadora ha seguido muy de cerca los casos de pederastia en el kínder Montessori Matatena, y externa su preocupación de que el inculpado Rafael Duarte, pueda salir bajo fianza y seguir el proceso en libertad.
Martha Tagle dijo que son muchos los casos de violencia y abuso sexual contra menores, donde incluso se ven involucrados familiares y a los niños se les condena a seguir viviendo con su abusador, pese a haber pruebas de abuso.
“Es urgente que a la luz de la ley de niños y adolescentes podamos trabajar de manera directa con los gobiernos, y que el gobierno capitalino se comprometa a capacitar a ministerios públicos en el acceso a la justicia para niños y niñas”, dijo finalmente la senadora en referencia al tema de abuso sexual infantil en el kínder ubicado en la delegación Benito Juárez.
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