Ciudad de México, en riesgo permanente por los sismos

La Ciudad de México está considerada como una de las zonas de más alto riesgo sísmico y volcánico. Se localiza en una de las regiones más activas del mundo, debido a que está en contacto con las grandes placas: la norteamericana y del Pacifico, pero además, limita con otras dos placas menores, que son la de Cocos y la del Caribe.

La placa de Cocos es la más activa y provocó los sismos del 19 y 20 de septiembre de 1985 en el entonces Distrito Federal. 

La zona de mayor actividad volcánica la constituye el Sistema Volcánico Mexicano el cual recorre todo el centro del país, desde las costas de Nayarit, en el océano Pacifico, hasta las costas de Veracruz, en el Golfo de México.

Dentro de ese sistema, algunos volcanes han tenido actividad en los últimos 500 años: el Ceboruco, el de Fuego de Colima, el Popocatépetl y el Pico de Orizaba. Después nacieron otros como El Jorullo (1769) y El Paricutin (1943) en Michoacán así como El Chichonal (1982) en Chiapas. 

Los sismos más intensos en la Ciudad de México

Los daños reportados hacen referencia a grietas y zanjas poco profundas en las calles y la destrucción de viviendas de baja calidad. Hay reportes de daños graves en edificios coloniales o en las cúpulas y torres de las iglesias.

Los mayores daños y las más altas intensidades en la capital son siempre observados en las inmediaciones del centro de la ciudad. 

El 28 de marzo de 1787 se registró un sismo de magnitud de 8.6 grados, con epicentro en las costas de Oaxaca 

En 1985, con una magnitud de 8.1, el epicentro fue a 350 kilómetros, en las Costas de Michoacán. Fallecieron cinco mil personas. Otras estimaciones arrojan más de 10 mil y cerca de 50 mil heridos, al menos unas 250 mil personas se quedaron sin hogar, más de 770 edificios colapsados o severamente dañados y pérdidas económicas que representaron el 2.1% del Producto Interno Bruto (PIB) y el 9.9% de la Ciudad de México.

El sismo del Ángel

Ocurrió el 27 de julio de 1957 a las 02:44 horas con epicentro en el sureste de Acapulco. La magnitud: 7.8 en la escala de Ritcher. Después de 14 meses de restauración y reforzamiento, el Ángel fue reinaugurado en septiembre de 1958. Desde entonces, la escultura ha permanecido intacta a pesar de los numerosos sismos que le han sacudido, incluido el de 1985.

La zona centro de la República Mexicana fue la más afectada, en especial la Ciudad de México en donde se registró un saldo de 700 muertos y 2 mil 500 heridos.

El sismo con más réplicas de la historia

Su epicentro fue Ometepec, Guerrero con magnitud de 7.5, el 20 de marzo de 2012 a las 12:02 horas. Se distingue por haber tenido la mayor cantidad de réplicas registradas en terremotos mexicanos (44 eventos de magnitud superior a 4.5 durante los primeros 30 días que siguieron a su ruptura). 

El sismo El Mayor-Cucapah

En Mexicali, Baja California con una magnitud de 7.2, tuvo lugar el 4 de abril de 2010 s las 15:40 horas.
Durante el sismo sólo se registraron dos decesos, cerca de 100 lesionados y daños severos en la infraestructura de canales de riego, vivienda, carreteras, puentes, escuelas y hospitales, entre otros.

Los sismos de 1999

Puebla con magnitud de 7 y Oaxaca con magnitud de 7.5, el 15 de junio y el 30 de septiembre de 1999 respectivamente, a las 15:42 horas y 11:31 horas. Ambas sacudidas causaron la muerte de 52 personas, además de provocar la caída de miles de casas de adobe y generar daños severos a monumentos históricos, hospitales y escuelas.

El sismo de Xalapa

Con una magnitud 6.4, el 3 de enero de 1920 a las 05:46 horas. Este sismo provocó la muerte de más de 600 personas ocasionadas por deslaves en las laderas del Río Huitzilapan. Representa el segundo más mortífero en la historia de México, sólo después del gran sismo de 1985.

El maremoto de Ola Verde

El 22 de junio de 1932  en Cuyutlán, Colima, ocurrió este sismo de magnitud 8.2 y generó un maremoto o tsunami. La ola de 10 metros de altura destruyó 400 casas y provocó la muerte de 75 personas y heridas a 100 más. Se le conoció como la Ola Verde. Cuentan que el agua se metió cerca de un kilómetro.