19/Abril/2024 P A CDMX: 27° EDOMEX: 25° PUE: 10° HID: 7° MOR: 32° QUER: 11° TLAX: 9° 9 y 0

La contingencia y su lluvia de mentadas

Enrique Núñez
Código Rojo
2016-05-09 13:44:01

La implantación por tres días consecutivos del programa de emergencia del doble hoy no circula, es —por mucho— la más impopular de todas las acciones de gobierno.

A los funcionarios hay que juzgarlos por los actos que pasan por su esfera de influencia, no por temas que no son causas directas de sus decisiones.

Un ejemplo lo tenemos en la administración federal. A Peña Nieto no se le puede endilgar el desgaste de nuestro peso ante el dólar, pero sí por la corrupción de su gobierno.

Lo mismo a Mancera le podemos cargar la creciente inseguridad, el pago de piso en delegaciones donde era inexistente y todo lo relacionado con servicios públicos, pero no la implementación del doble hoy no circula.

El problema para Miguel Ángel Mancera es que no fue de una decisión optativa; es una acción obligada, cuyo costo político le pegan en su desgastada imagen y por consecuencia, en su calificación como gobernante.

Lo que muchos de los que mentaron madres no saben, es que existen parámetros internacionales que marcan los límites de contaminación.

Pero como aquí el que no se queja no es mexicano, para homenajear a las madrecitas cualquier pretexto es válido.
Así las cosas, hiciera lo que hiciera, Mancera quedaba como el cohetero.

En nuestras redes sociales, las mentadas para el mandamás de la CDMX fueron el común denominador. Mancera durante tres días se convirtió en el "payaso de las cachetadas", porque los capitalinos encontraron en él a la figura más próxima para descargar su ira.

Y saltan las preguntas: 

¿Qué pasa si no se implementa la Fase 1 de la contingencia ecológica? 

¿Qué sucedería si como los pájaros en anteriores contingencias, empiezan a caer humanos al piso?

¿Las mentadas cambiarían por la exigencia de su renuncia?
Sin duda, por naturaleza propia nos quejamos pero poco actuamos.

El día que se anunció el retorno de estos planes de contingencia, muchos de nosotros empezamos a buscar la forma de burlar el programa.

Los pudientes con dos o más autos a revisar sus terminaciones para no quedarse varados ningún día de la semana.

Otros con menos capacidad monetaria empezaron a buscar una carcacha barata con la terminación de placas de su conveniencia.

Y como siempre, los que pagaron el pato fueron los jodidos, que no tuvieron más remedio que adelantar sus horarios para sortear las complicaciones del obsoleto y rebasado transporte público.

No recuerdo haber escuchado a un solo amigo o conocido planear la compra de un auto híbrido o eléctrico.

Sin duda Mancera y todos los gobiernos de la Megalópolis tienen su parte de responsabilidad, pero ya es tiempo de que todos asumamos la nuestra.

Empresarios, industriales, gobernantes y ciudadanos comunes debemos tomar al toro por los cuernos y sacrificar lo que se tenga que sacrificar para meter al orden a esta gran urbe, que está en camino del colapso.

Sí se trata de echar mentadas y queremos empezar con Mancera, me sumo a la iniciativa, siempre y cuando nos toque nuestra parte sin usar madre postiza.

Pero que sirvan esos recordatorios maternales para reflexionar y asumir que la Megalópolis es una responsabilidad de todos.

De mi parte, aunque sea a crédito, buscaré una opción no contaminante y sobre todo, dejaré de quejarme hasta no corregir los vicios arrastrados.
Y tú ¿qué haces por la Megalópolis?

 


images/diario/201807/portadadiario.47.201807.jpg

2024-04-19