El sufragio ciudadano, nueva moneda de cambio

La democracia en México está siendo devastada a billetazos, la voluntad popular existe solo relativamente. Pero es aún más devastadora la falta de transparencia. Esta, irrita a los votantes y los ahuyenta del proceso. En alusión a la elección que se llevó a cabo en el Estado de México, donde el excandidato del PRI, Alfredo del Mazo, se perfila como el ganador de la misma, puesto que el rango máximo de diferencia entre él y la exaspirante de Morena, Delfina Gómez es de 2.83 por ciento.

Sin embargo, y aunque nos duela admitirlo, un sistema tan disfuncional como ese no podría tener vigencia sin el respaldo de sectores de la ciudadanía, incluidos los medios de comunicación, que por encima de la calidad del proceso electoral, se privilegian del mismo.

Hoy buena parte de la prensa y de la sociedad organizada pasa por alto el lodazal, las guerras mediáticas en internet y en los medios tradicionales y el inocultable desvío de recursos públicos.

¡Corrupción electoral! cómo pretendemos fortalecer un Sistema Nacional Anticorrupción, cuando el aparato de estado se usa impunemente para dar el triunfo a un candidato. Por ello, pensar que funcionarios públicos provenientes de una estructura tan sucia pelearán contra la corrupción, resulta falaz. Si ya ganaron la subasta ¿por qué querrían cerrarse el acceso a recuperar su inversión y la de quienes los apoyaron?

El precio de las elecciones

Aunado a lo anterior, es incomprensible que en un país como el nuestro considerado uno de los más desiguales con políticas sociales contra la pobreza, ineficientes; y sin resultados en más de 25 años; se tenga la democracia más costosa, 18 veces más cara en promedio que en el resto de las naciones latinoamericanas.

Asimismo, el número de personas con escasos recursos ha crecido de tal forma que hasta se desconoce la cifra exacta porque mientras el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), manifiesta que existen 55.3 millones de insolventes, mientras que el estudio Evolución de la pobreza y la estratificación social en México 2012-2014 (julio de 2015) realizado por los expertos investigadores del Colmex, Julio Boltvinik y Araceli Damián, estiman que en el país hay 100.7 millones de personas con escasos recursos.

Tan solo en el Edomex las campañas para elegir al próximo mandatario, representaron costos que verdaderamente hablan de una insensibilidad a la realidad social, Alfredo del Mazo reportó el mayor gasto con 115.9 millones de pesos, un promedio de 1 millón 965 mil 887 pesos por día, mientras que la excandidata de Morena, Delfina Gómez, registró un monto de 114.1 millones de pesos, es decir, 1 millón 934 mil 325 diarios, de acuerdo con el último reporte del INE previo a la jornada electoral, por lo que habrá que sumarle lo que gastaron para la movilización el día de la misma.

Larga vida al modelo neoliberal

Detrás de los punteros se encuentra la excandidata del PAN, Josefina Vázquez Mota, con un monto de 94.4 millones de pesos contabilizados en la plataforma del INE. En cuarto lugar, se queda el perredista Juan Zepeda, con un gasto reportado de 47.3 millones de pesos.

En conjunto, el saldo de las campañas electorales que finalizaron el pasado 31 de mayo fue de 485 millones 800 mil 670 pesos, es decir 8 mil 096 pesos por los aproximadamente 60 días de promoción de voto, de acuerdo con cifras del Instituto.

De estos, los exaspirantes a gobernar la entidad mexiquense hicieron un gasto estimado de 278 mil 934 pesos por cada una de las horas de los 59 días que buscaron la aprobación de los habitantes.

Los 6 excandidatos en la entidad reportaron recursos hasta 8.5 veces mayores que los contrincantes en Coahuila y Nayarit.

Señores, se avecina la votación presidencial ¿Cuánto gastará el gobierno federal en 2018 para ganarla? ¿Cuánto nos costarmarga vida al ralentidad de 278 mil tode pesos.á a los mexicanos la compra de un país para perpetuar el modelo neoliberal y así seguir sumiendo en la pobreza extrema a más millones de mexicanos?