Turbulencia tricolor

Es bien cierto que siempre hay dos historias en nuestra Historia, una es quien la escribe y la otra es quien la cree.

La historia reciente de Manlio Fabio Beltrones, desde todavía en la presidencia del PRI nacional, había declarado que en sus últimos encuentros con el Presidente Enrique Peña, las discusiones se centraban en los resultados magros de la elección a consecuencia de la corrupción de los gobernadores salientes donde el PRI perdió.

Señaló que debía hacer un ajuste a fondo al gabinete presidencial, así como la libertad para actuar en contra de los gobernadores que le hicieron daño al PRI como Javier Duarte.

La falta de comunicación de la Presidencia hacia el PRI como partido oficial, dejó mucho que desear según Beltrones, puesto que se tenía que enterar por los medios de comunicación las iniciativas como la validación de los matrimonios gays, el aumento a la gasolina, etc.

En su discurso final de renuncia a la presidencia tricolor ante la Comisión Política Permanente, es importante señalar lo que dijo en tan pocas palabras “lo que los partidos hacen sus partidos lo resienten”.

Está demostrado en la Historia, que cuando a la sociedad se le hiere de alguna manera y en este caso la corrupción gritada a los cuatro vientos, fue una puñalada ver cómo el gobernador de Veracruz, tal vez el estandarte de la impunidad y corrupción desmedida, nadie se ha atrevido a enfrentarlo.

La sociedad busca que el propio gobierno federal crucifique a ese estandarte, que lo meta a la cárcel a él y a sus más cercanos colaboradores; y para que la cuña apriete, tiene que ser del mismo palo.

Entonces y luego entonces, la sociedad saciará sus ansias de rebeldía y hasta ese momento el PRI podrá acercarse de nueva cuenta a una sociedad lastimada.

Si no lo hace, el 2018 se verá opacado.

Tal vez por eso Beltrones se deslinda en estos momentos con el pretexto de los resultados, pero lo más seguro y conociendo su amplia experiencia política, es con la finalidad de no cargar con la losa pesada que está cargando el PRI en estos instantes.

El discurso según la Historia es parecido, sino con las mismas palabras de Colosio, sí en ese sentido.

También es cierto que en la Historia de este país, son varios los casos que los subordinados políticamente hablando, le renuncian al jefe, un ejemplo cercano en tiempo es Felipe Calderón con Fox, quien llegó a la cúspide.

La confrontación como se ve, es abierta con el gobierno federal, directamente con Peña Nieto.

De seguir así las cosas dentro del PRI, veremos a los opositores de los otros partidos políticos, cómo se ríen y aventajan no por mucho, porque también con ellos se están cociendo las habas.

Por un lado los corceles se están cansando y otros están desertando.

PRI contra gobierno, es por eso que Peña Nieto impuso a su prima Carolina Monroy para controlar la rebelión que se avecina.

Beltrones ya entró en rebeldía y en el camino hacia el 2018 deslindándose del gobierno más no del PRI.

También es cierto que los jefes en la Historia marcan la pauta a seguir, ¿será que el PRI local solo espera los tiempos para renunciar por los resultados obtenidos?

Tiempo al tiempo a las historias verdaderas.