José Antonio Meade, el hombre, el nombre

El dueño de Morena y puntero en la carrera presidencial 2018, Andrés Manuel López Obrador, ve al secretario de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade Kuribreña, como candidato no solo del PRI, sino de una alianza generacional que por supuesto le restaría posibilidades para pasar de presidente legítimo a líder constitucional.

“Meade, como Videgaray, es egresado del ITAM, el instituto de tecnócratas neoporfiristas que han dañado la economía de la gente y a la nación”, advierte el morenista y aspirante eterno de Los Pinos.

Asimismo, directivos de partidos políticos afines, cúpulas empresariales, gobernadores, dirigentes sindicales y representantes de la sociedad civil en general, ven al titular de la SHCP como aspirante.

Solo que en este momento, para ser abanderado del Revolucionario Institucional, se requiere de por lo menos 10 años de militancia, aunque ese tema podría ser rebasado en la Asamblea Nacional, a realizarse el mes entrante.

Como se sabe, a partir de agosto, el tricolor podría postular a un solicitante externo, aunque al interior, las llamadas “fuerzas vivas” han dado para atrás a esa intentona del dirigente actual, Enrique Ochoa Reza.

En otras palabras, el PRI estaría pensando en un candidato que no milite en sus filas, es decir, el llamado “extrapartidario”, como usted le quiera llamar, debido a recientes escándalos de corrupción protagonizados por gobernadores.

En ese marco, entre enero y abril de 2018 se conocería en nombre del “bueno”, del “hombre”, del “Salvador”.

Meade ni milita en el PRI

En la contienda del Revolucionario Institucional, un grupo cercano a Ochoa Reza se ha pronunciado por adelantar los tiempos de la candidatura presidencial, y que el abanderado tenga no menos de 10 años de militancia.

Con dicha medida, algunos pretenden dejar fuera a José Antonio Meade, que sería la mejor carta del PRI para hacerle frente a López Obrador, a menos que el tricolor se sume a la corriente denominada Alianza Generacional. En todo caso, lo que se pretende es cerrarle el paso a “El Peje”.

Representado por un nutrido grupo de priistas de viejo y nuevo cuño, Alianza Generacional demandará en agosto en la Asamblea Nacional del Revolucionario Institucional piso parejo, con lo cual se pondría fin al dedazo, entendido este como el apoyo sectorial (CNOP, CNC, CTM) y pasar a la consulta a la base militante.

Mientras tanto, Meade Kuribreña ha servido en los gobiernos del PAN y del PRI, y ha mostrado capacidad donde lo ponen. Esa realidad ¿inclinaría la balanza a su favor o pesaría más la resistencia de la actual dirigencia?